Las fibras recicladas son una forma de combatir los problemas ambientales. Usar desechos para producir prendas de punto y transformarlas en ropa es una excelente manera de prevenir la propagación de la contaminación y hacer avanzar el mercado de la moda.

Hay muchos residuos que pueden convertirse en nuevas prendas, un ejemplo son las llantas. Se supone que los neumáticos pueden tardar hasta 600 años en desaparecer por completo de la naturaleza. Por el contrario, sus fibras pueden descomponerse en pequeños pedazos y luego transformarse en tejidos para dar vida a nuevas prendas.